Comparto lo que tengo. Los niños ayudan a los niños

Elementos relacionados

    Este es el lema con el que viene expresado el gran contenido de la Jornada de la Infancia Misionera de este año 2025.

    Es una llamada a que los niños se sientan responsables de lo que tienen y están viviendo y lo que no tienen ni pueden vivir otros niños como ellos.

    Es una llamada clara a educar a los niños en la solidaridad desde la vida con otros niños más desfavorecidos, precisamente porque los niños son mucho más sensibles a las necesidades de los que son como ellos pero sin las posibilidades suyas y, por otra parte, mucho más solidarios con las distintas situaciones de necesidad que viven otros.

    Para desarrollar esta conciencia de solidaridad en el corazón de los niños no tenemos que olvidar que los mayores, especialmente los padres, juegan un papel fundamental. Si desde pequeños sabemos educar en la solidaridad, en la sensibilidad ante las necesidades de los demás, nuestros hijos serán personas solidarias y no egoístas y serán capaces de construir un mundo mejor.

    Para despertar esta conciencia de solidaridad en los más pequeños no podemos hacerlo solo con nuestra palabra o nuestros buenos consejos. Ellos necesitan ver que, nosotros, los mayores, también somos solidarios ante las necesidades de los demás, necesitan comprobar que para nosotros, en nuestra familia, el ser solidarios es algo realmente importante, y lo demostramos en las ocasiones en las que nos encontramos con necesidades y personas necesitadas de cerca y de lejos.

    Hoy tenemos muchas oportunidades para demostrar a los pequeños nuestra solidaridad y de enseñarles a vivirla en su vida ya desde pequeños.

    Hoy nos encontramos con familias que no tienen trabajo, niños que no pueden tener juguetes porque no tienen para comer. Es necesario hablar de ello en la familia, hablarles a los niños de que es importante compartir con los que no tienen como nosotros pero, sobre todo, es importante enseñarles ya, desde muy pequeños, a prescindir de algo que para ellos no significa mucho y que a otros les puede ayudar mucho.

    Un gesto educa mucho más que mil palabras. Con los niños podemos tener gestos de solidaridad y ayudarles a entender su significado, gestos en los que ellos se sientan protagonistas, sabiendo prescindir de algo no necesario, valorando algo que ellos tienen y que a otros muchos les falta, colaborando con sus pequeños medios y en su medida, para que otros puedan sentirse un poco mejor.

    El lema de este año es Comparto lo que tengo, y eso quiere decir que todos pueden compartir algo con los que no tienen las posibilidades que ellos tienen, dando algo de la propina para esos niños cercanos a nosotros y que vemos con necesidades y otros de lejos que están en guerras, llenos de temor y que no tienen nada de lo mucho que a nosotros nos sobra.

    Una de las ocasiones en las que podemos ayudarlos a hacer este gesto de compartir con los demás es esta ocasión de la jornada mundial de la Infancia Misionera.
     

    Acompañemos a nuestros pequeños en este domingo a la celebración de la eucaristía y enseñémosles lo importante que es ser solidario con los demás


    La infancia misionera golpea nuestra conciencia sobre la realidad de tantos y tantos niños necesitados que viven cerca de nosotros y a los que debemos sentirnos llamados a ayudar, y niños de lejos de nosotros mucho más necesitados, con los cuales tenemos algo que compartir.

    Es realmente emocionante la celebración de la Santa Infancia Misionera, cuando nos juntamos todos los niños de todas las parroquias para tener una jornada de pensar y concienciar a los niños. Ellos también pueden ayudar a los que no tienen para vivir. En esta jornada juntos celebramos la eucaristía, en la que ayudamos a los niños a tomar conciencia y responder con generosidad a la llamada que la solidaridad les hace desde la realidad de otros niños más necesitados.

    Así creemos que estamos formando esta conciencia solidaria de nuestros niños, que serán los responsables de nuestra sociedad del mañana. Desde lo que les hemos enseñado desde niños, van a ser capaces de hacer un mundo mucho más solidario y menos egoísta.
     

    Hoy nos encontramos con familias que no tienen trabajo, niños que no pueden tener juguetes porque no tienen para comer. Es necesario hablar de ello en la familia


    Acompañemos a nuestros pequeños en este domingo a la celebración de la eucaristía y enseñémosles lo importante que es ser solidario con los demás y cómo serlo con todos esos niños que carecen de tantas cosas que ellos tienen y que tal vez no valoran porque nunca les han faltado.

    Ayudémosles a recordar a los misioneros que siempre están al lado de los más necesitados y dan su vida para que los niños puedan mejorar su situación vital y pidamos en familia por esos misioneros que cuidan de los niños, y por los niños que no tienen lo necesario para vivir dignamente.

    Pensemos en un gesto para hacer toda la familia, juntos, en este domingo. Un gesto de poner un poco de lo que tenemos para entregarlo para las misiones, para los niños en situación de pobreza. Podemos ayudar con nuestra colaboración y con nuestra limosna, sabiendo desprendernos de nuestra propina de este domingo, para entregarlo por esa necesidad, siendo solidarios con los que menos tienen. Estaremos haciendo de los niños esas personas solidarias con otros porque cada uno puede decir, como el lema de este año: Comparto lo que tengo.

    + Gerardo
      Listado completo de Cartas