Bolaños de Calatrava acogió el pasado 19 de diciembre la tercera edición de Las Posadas, una iniciativa de la parroquia que recuerda la petición de posada de José y María en Belén.
Se trata de un «pregón de Adviento y Navidad en el que recordamos a todo Bolaños que Cristo quiere nacer en su casa, quiere que lo acojamos en su hogar», explicó Marcos Sevilla, sacerdote responsable de la actividad.
Con Las Posadas se recrea por las calles de Bolaños la negativa a aceptar a Dios a causa del pecado. De este modo, José y María van a varias casas que los rechazan, pidiendo a los posaderos al marcharse que acepten con misericordia a los siguientes viajeros que llamen a su puerta y dejándoles la Luz de la Paz de Belén en su hogar. Además, en cada una de las posadas, al llamar a la puerta se representa con bolsas de caramelos que se expulsa un pecado capital, justo lo que impedía a los posaderos acoger a Dios. Después, esos caramelos formaron una piñata que los niños rompieron en la plaza del pueblo, visualizando que se acaba con el pecado.
Con villancicos, teatro y baile, las posadas lograron llenar Bolaños de ambiente navideño, trasladando a todos el mensaje de que Cristo vence al mal. La actividad concluyó en la iglesia, con un pregón navideño en el que los niños anuncian que «Cristo es la luz que viene a rescatar al hombre caído».