El pasado 31 de mayo la parroquia de Ntra. Sra. de Altagracia de Manzanares celebró su fin de curso en la casa de convivencias de Moral de Calatrava.
En los actos de celebración, se insistió, siguiendo la programación pastoral de este año, en la Pastoral Familiar. De este modo, el párroco, Secundino Martínez, invitó a la comunidad al encuentro, diciendo: «Aquí cabemos todos. Los que tienen una fe viva y los que tienen una fe perpleja, los que viven la fe con normalidad y los que están en búsqueda, los que están dentro y los que nunca estuvieron, o estuvieron cerca de la Iglesia y, por lo que sea, ahora están más alejados. Los que viven las carencias de la pobreza y los que viven los vacíos de la abundancia. Todos. ¡Tú también!».
Al encuentro asistió todo el «árbol parroquial»: grupos de matrimonios, catequistas, lectores, ayudantes en el templo, niños, coro y hermandades. Todos participaron en una visita al templo de la parroquia de San Andrés, de Moral de Calatrava, y al convento del Cristo de la Humildad, donde se celebró la comida compartida.
Por la tarde, se celebró la Eucaristía en la ermita del patrón de la localidad, el Santísimo Cristo de la Humildad, que presidió el párroco de Altagracia, Secundino Martínez. Con él, concelebró el párroco anterior, Jerónimo López, que ese mismo día cumplía 59 años de sacerdocio. Estuvo presente, en las celebraciones y en la preparación del encuentro, el otro sacerdote que ejerce su labor en la parroquia, José Felipe Fernández.