El 26 de mayo Cáritas presentó la Campaña de Temporeros para este año 2021 con el lema El trabajo digno da buen fruto.
En la rueda de prensa intervinieron Teresa Requena Jiménez, directora de Cáritas Tomelloso, María Dolores Olmedo, coordinadora del Programa de Acogida y Acompañamiento y María del Carmen Ruiz Parra, coordinadora del Programa de Empleo.
Cáritas plantea esta campaña buscando el reconocimiento, acceso y protección de los derechos humanos de todas las personas. Muchas de ellas se ven obligadas a emigrar buscando mejores condiciones de vida y, algunas de ellas, llegan a nuestros pueblos.
Muchos de estos temporeros sufren una vulneración de derechos que Cáritas denuncia cada año con esta campaña, animando a todos los actores implicados en la acogida de los temporeros a acoger, proteger, promover e integrar. Tanto las instituciones públicas como los agricultores y empresas que contratan a los temporeros pueden hacer mucho para mejorar su situación.
En concreto, este año Cáritas subraya que, cuando se ofrece un trabajo digno a los temporeros, el fruto que recoge toda la sociedad es bueno, evitando las numerosas vulneraciones de derechos que se ven cada año.
Trabajando por el trabajo digno
Desde Cáritas se piden contratos por escrito a los temporeros, con alta en la Seguridad Social y cotizando por todas las horas de trabajo. Del mismo modo, se llama al respeto en los tiempos de descanso y en el salario según el convenio.
Además, se pide que se busquen alojamientos dignos, evitando de este modo los asentamientos, en muchos casos con hacinamiento.
Como se ve cada año, algunos «intermediarios» laborales actúan como mafias, cobrando comisiones a los trabajadores. Esta situación, que hay que denunciar, llega a esclavizar a los temporeros, en algunos casos con retención de la documentación. Ante estas situaciones, acudir a Cáritas para que sea el intermediario laboral da seguridad tanto al empresario como a los trabajadores.
Una llamada a los actores implicados
A través de esta campaña se apela a la necesidad de aunar esfuerzos entre todas las personas que intervienen en las campañas agrícolas: empresarios, temporeros, administraciones públicas, etc.
En concreto, se pide a los ayuntamientos que habiliten los recursos necesarios para ayudar a los temporeros: duchas, alojamiento, medidas de higiene y protección.
A los sindicatos, entidades agrarias y las partes implicadas en la negociación de los convenios agrícolas se les pide que procurar el alojamiento a los temporeros sea obligatorio, algo que no se recoge en el convenio actual.
Servicios y actividades durante esta campaña
Cáritas prepara esta campaña con un doble objetivo: sensibilizar y denunciar las situaciones de vulnerabilidad y precariedad que sufren los temporeros y, por otra parte, informar sobre los recursos y dispositivos de atención, información y acogida.
De nuevo, la campaña está marcada por la emergencia sanitaria, por lo que desde Cáritas llaman a que se tenga en cuenta que este colectivo es uno de los más vulnerables y con más dificultades de acceso a la sanidad.
La campaña se extenderá hasta finales de año con la recogida de aceituna, por lo que las cada Cáritas organizará varios dispositivos atendiendo a la actividad agraria que se desarrolle en cada localidad.
Habrá escucha, acogida, información y orientación sobre los recursos disponibles en cada pueblo. Además, habrá ayudas básicas para cubrir las necesidades de alimentación e higiene. Asimismo, se ayudará con ropa, mantas, calzado y toallas con lotes preparados y previamente higienizados que se proporcionarán a través de los talleres de reutilización textil de Tomelloso, La Solana y Daimiel.
Toda esta labor se une a la coordinación con ayuntamientos, servicios sociales, y sindicatos para informar de las dificultades de los temporeros, implicando a cada institución para que ponga a disposición de estas personas recursos como pabellones municipales, alojamientos alternativos o aquello que se vea más conveniente en cada caso.
Además, las Cáritas de cada localidad realizarán acciones de sensibilización y denuncia a toda la población con comunicados en las parroquias y la difusión de la campaña en medios locales.