El obispo, monseñor Gerardo Melgar, celebró ayer un encuentro navideño con la prensa en el obispado, donde felicitó a todos los periodistas por el nacimiento del Señor, así como les agradeció todo el trabajo en 2017.
Monseñor Melgar volvió a subrayar la amabilidad y cercanía de todos los fieles de Ciudad Real hacia el obispo, algo que según ha manifestado en otras ocasiones, vivió desde el principio de su llegada, en mayo de 2017.
En el encuentro, el obispo resumió a grandes rasgos el trabajo pastoral que se está llevando a cabo, resaltando tres ámbitos: la evangelización de la familia, la inserción de los laicos en la tarea evangelizadora y el trabajo en la pastoral vocacional.
En cuanto a la familia, monseñor Melgar habló de los dos grandes encuentros con matrimonios que tuvo el pasado curso, y que no solo cumplieron las expectativas, sino que se desbordaron en número. Para el obispo, no solo hay que cuidar a los matrimonios, sino acompañar desde la Iglesia todo el proceso, también desde el noviazgo.
Sobre la pastoral vocacional y a los sacerdotes, se refirió a la nueva figura del delegado del Clero, que ha empezado a trabajar este curso y que no existía en nuestra diócesis. Además, el obispo se ha reunido, desde su llegada a la diócesis, con muchos sacerdotes, escuchando sus inquietudes y conociendo mejor al presbiterio. Al hablar de vocación, no se refiere solo a lo sacerdotal, sino a «la necesidad que tenemos todos de saber qué queremos hacer con nuestra vida […], con la pregunta ¿y Dios por dónde me estará llamando a mí?» Afirmó que la crisis vocacional afecta a todos y, a la vez, es tarea de todos los fieles.
El obispo comenzará en 2018 una visita pastoral que empezará por las parroquias de la capital y que llegará a todos los pueblos de la provincia de Ciudad Real.