El sábado 2 de noviembre, conmemoración de los fieles difuntos, el obispo, don Gerardo Melgar, presidirá por primera vez —el pasado año no pudo celebrarse a causa de la lluvia— la eucaristía en el cementerio de la capital ciudadrrealeña. La misa comenzará a las 12:00 h. No habrá ninguna otra eucaristía a la misma hora en ninguna parroquia o capilla de la ciudad.
La misa se celebrará al aire libre en el espacio adecuado para ello en el cementerio. Habrá sillas suficientes para que todas las personas que deseen asistir puedan tener un asiento.
Si las inclemencias del tiempo no permitieran la celebración en el cementerio, la misa se trasladaría a las 20:00 h. a la Catedral.