Cuaresma sobre cuaresma

Compartimos un artículo de Arcángel Moreno Castilla, sacerdote y delegado de Liturgia en la Diócesis de Ciudad Real, sobre el inicio de esta Cuaresma en plena pandemia.

Llega otra vez la Cuaresma. Lo que faltaba, ya que estamos bajo la sombra borrosa de la crisis de la pandemia, ahora llega la Cuaresma. Aquí no hay quien levante la cabeza. Ahora los cristianos dedicados a las renuncias, ayunos, privaciones… ¿no es bastante ya con la crisis que tenemos encima?

Así piensan los que han caído en la tentación del desánimo y no quieren subir al monte de la transfiguración con el Señor.
No somos vendedores en cualquier templo de los dioses paganos que suenan bien al oído, pero no llenan el corazón, porque Dios ama tanto al mundo que su Hijo camina hacia una entrega muy precisa: sólo por amor se hace una humanidad nueva.
 

Algo tiene esta época que alumbra una nueva perspectiva: si el grano de trigo no muere, no puede dar fruto.


Algo tiene esta época que alumbra una nueva perspectiva: si el grano de trigo no muere, no puede dar fruto. Efectivamente, morir al hombre viejo, al de estilo altanero y egoísta, morir al hombre que se mira a sí mismo como un dios que no piensa que su vida repercute en los demás. El hombre orgulloso que creía que podía con todo y que ha sido derrotado por un bichito que ha puesto en crisis al todopoderoso hombre postmoderno. La chulería del hombre que cree en su propia construcción ha caído en la cuenta de que ser humanos es mucho más, y que se crece mirando hacia el interior y no solo en la superficie de los hechos y los acontecimientos.

Estas son referencias a los evangelios dominicales de la cuaresma de este año. ¿No será necesario que la Cuaresma nos anime a prepararnos para ser luz en el mundo que necesita morir para vivir (Pascua)? La Cuaresma es prepararse a una auténtica escalada, cristianos que no callan, testigos de una amistad profunda con el crucificado resucitado, que animan el verdadero cambio de la sociedad con la novedad y deseo del hombre nuevo.

Arcángel Moreno es sacerdote y delegado de Liturgia en la Diócesis de Ciudad Real