El sábado 23 de noviembre, más de 100 profesores de Religión de nuestra diócesis, se reunieron en una jornada de formación y convivencia en nuestro Seminario Diocesano.
El día comenzó con una oración, presidida por nuestro Obispo Don Gerardo Melgar. Después el delegado diocesano de enseñanza, Pablo Rodríguez Cabanillas presentó la estructura y el desarrollo del día de trabajo: un primer momento con la charla Cuarenta años de la clase de Religión en democracia impartida por Carlos Esteban Garcés con un posterior debate y un segundo momento, más festivo, con un concierto del cantante Nico Montero.
El conocido como documento del 79 supuso un nuevo modo de entender la enseñanza de la Religión en una sociedad plural y en un marco democrático.
Carlos Esteban Garcés; profesor titular de Pedagogía de la Religión en el Instituto Pontificio San Pío X, coordinador de la formación permanente del profesorado de Religión en la Delegación Episcopal de enseñanza de Madrid y uno de los mayores expertos sobre la clase de Religión en nuestro país, expuso los importantes cambios que produjeron en la clase de Religión con la llegada de la democracia a nuestro país, poniendo de relieve la importancia del documento de 1979 de la Comisión Episcopal de Enseñanza titulado
Orientaciones sobre la enseñanza religiosa escolar, su legitimidad, carácter propio y contenido, documento del que también celebramos 40 años de su publicación. También hizo un breve recorrido por las diferentes leyes educativas, en democracia, y cómo éstas afectaron a la asignatura de Religión.
El conocido como documento del 79 supuso un nuevo modo de entender la enseñanza de la Religión en una sociedad plural y en un marco democrático.
La enseñanza de la Religión se sitúa en el marco de las finalidades propias de la escuela, como materia ordinaria, tanto en su forma como en sus métodos.
Las aportaciones que vertebran este nuevo concepto de enseñanza de la Religión en la escuela son dos: su dimensión cultural, proponiendo un diálogo entre la fe y la cultura en el ámbito escolar; y su dimensión escolar, afirmando expresamente que esta enseñanza de la Religión se sitúa en el marco de las finalidades propias de la escuela, como materia ordinaria, tanto en su forma como en sus métodos.
En el debate posterior, el ponente dio respuesta a las preguntas formuladas por los asistentes.
La Jornada finalizó con un concierto del cantante católico gaditano Nico Montero que hizo un breve recorrido por algunos de los temas más conocidos de su repertorio, interpretando una de sus canciones más conocidas, como es
El Señor es mi pastor.