Cerca de cuarenta catequistas y una treintena de niños y adolescentes han ofrecido un Via Crucis con recursos escenográficos y audiovisuales. Casi cuatrocientas personas pudieron rezar y disfrutar de este original Via Crucis que se desarrolló el pasado Viernes de Dolores entre la Casa de la Iglesia y el templo parroquial.
Seis escenas han compuesto esta iniciativa que tenía la pretensión de comtemplar y meditar el recorrido de Jesucristo cargado con la cruz por la Vía Dolorosa.
En estos últimos años, diversas iniciativas nos acercan en la Cuaresma al misterio de nuestra redención. Se reproducen escenas de la vida de Jesús a través de Pasiones vivientes o a través de imaginería que representa distintas escenas de la vida de Jesús, hasta su muerte y resurrección.