El 11 y 12 de febrero le tocó el turno para la Visita Pastoral a la parroquia de San Juan Bautista de la Concepción de La Solana, donde los dos sacerdotes recibieron al obispo, monseñor Gerardo Melgar, en la mañana del día 11.
Tras la oración, visitaron la Residencia de Ancianos Ntra. Sra. de Peñarroya, donde el obispo presidió la celebración de la Unción de Enfermos, visitando en sus habitaciones a dos residentes impedidos.
Después, tuvo un encuentro con los voluntarios de pastoral de la salud, que realizan su voluntariado también en la residencia, para visitar después a otros ancianos en sus domicilios.
Al término de la comida, a la que se unió el arcipreste de Mancha Este, José Carlos Redondo, fue el momento del diálogo personal de los sacerdotes, Jesús Navarro y Eduardo Guzmán, con el obispo.
A media tarde, don Gerardo se reunió con los catequistas, que le presentaron su trabajo con cifras y actividades. Aquí el obispo destacó la juventud del grupo, animándolo a dar testimonio de su fe y a no dejar la formación.
La misa, momento central de toda Visita Pastoral, se celebró con los ritos propios en estos casos, con la recepción solemne del obispo y la oración. Todos los fieles renovaron sus promesas bautismales durante la celebración que dio paso a la asamblea parroquial.
En las asambleas parroquiales que preside monseñor Melgar se reúnen todos los grupos de la parroquia, que se presentan explicando las actividades que realizan. A cada uno de ellos les respondió el obispo, animándolos en la misión. Incidió mucho en la familia, no solo por la importancia de la institución familiar, sino para que sea ejemplo en el que se miren como parroquia. Además, hizo hincapié en la importancia de personas que hablen a los niños de Dios, en la atención pastoral y la oferta de evangelización concreta a adolescentes y jóvenes. Se alegró, asimismo, de la pastoral familiar y de la labor de concienciación que hace el Grupo de Animación Misionera (GAM). Concluyó la asamblea dirigiéndose a las hermandades y animándolas a vivir cada día más la fe que tienen que difundir.
Al día siguiente, 12 de febrero, monseñor Gerardo Melgar comenzó la jornada en la parroquia con la misa en el convento de San José de las Monjas Dominicas de La Solana, que llevan orando más de 400 años en La Solana (se fundó en 1593). En la misa, concelebraron los tres sacerdotes que hay actualmente en La Solana, y que se encargan conjuntamente de la atención del convento. Después de la misa, el obispo se reunió con las monjas.
De nuevo, el grueso de la mañana se dedicó a la visita a los enfermos, a los que entrega un documento en recuerdo de la Visita Pastoral.
La tarde comenzó con la visita al CADIG El Pilar que AFAS regenta en la localidad. Se trata de un centro residencial para personas con discapacidad en el que la parroquia trabaja para integrar a todos los residentes en la vida parroquial, con la ayuda de los profesionales del centro, adaptando los encuentros y evolucionando poco a poco en la atención pastoral.
Finalizando la visita, don Gerardo presidió el Consejo de Pastoral y el Consejo de Economía. Los secretarios de ambos órganos le presentaron el trabajo que realizan. Después, el obispo invitó especialmente al consejo pastoral a no considerarse una herramienta del sacerdote, sino a practicar la independencia que da «salir a la calle», inventando nuevos modos de evangelización con la creatividad propia de los evangelizadores. Después, les presentó el modelo de consejo por comisiones del que se escribió en la programación pastoral de este año y en el documento de las Unidades de Acción Pastoral.
Al término de la reunión, monseñor Melgar presidió la misa en el templo de Santa María, que también pertenece a la parroquia de San Juan Bautista de la Concepción.
Para cerrar los dos días de visita se reunió con varios matrimonios, a los que habló sobre las necesidades de una educación auténtica, la búsqueda de escalas de valores realistas y que tengan en cuenta a la persona, el cultivo de la comunicación y el diálogo, la recuperación de la capacidad de sacrificio…
El resumen de la visita a esta parroquia, que forma Unidad de Acción Pastoral con la parroquia de San Carlos del Valle y la de Pozo de la Serna, son dos intensos días de encuentros en los que el obispo ha podido conocer la vida parroquial, atendiendo sus demandas y preocupaciones; un encuentro pastoral en el que el obispo ha animado a continuar con el trabajo, pensando siempre en la evangelización y en el crecimiento espiritual de La Solana.